18 mayo, 2012
UN CUENTO TRADICIONAL
26 marzo, 2011
De pronto, un pensamiento pasa por mi cabeza: "Me tengo que comprar un gato de verdad, éste del coche está muy sucio."
Bajo aquel cielo azul, el morado penetró en sus ojos cómo si se tratara del mejor manjar que hubiese encontrado. Fue hacia él y disfrutó hasta saciarse.
Aquella abeja gozó al fin de la morada flor.
¡Y la hormiga nos llevó hasta el trabajo!
Estuve pensando coger una de ellas para mi madre; pero... poco a poco, según entraba la luz, me fui dando cuenta de una cosa...
¡Estaba sentada en el sofá mirando mi cortina!
el Sol es muy grande
y yo siempre lo veo
brillante, brillante.
Da mucho calor,
porque es de fuego;
por eso calienta
a todo el mundo entero.
Yo le quiero mucho,
yo le quiero tanto,
que no le puedo ver
llorando, llorando.
Él me dice siempre,
al amanecer:
Niña péiname el alma
para yo poderte ver.
Esto provocó mi curiosidad por cómo los cultivaban y, al día siguiente, decidí ir a un campo de cultivo. Al llegar allí, vi mucha gente, todos muy abrigados por la humedad y el frío. Las mujeres iban con pañuelos y sombreros, y los hombres solo con sombrero. En una mano llevaban una tijera; mientras con la otra, recogían la flor, cortándola a ras de suelo para dejar el tallo largo.
Todos los tulipanes eran blancos; algo extraño, pues en el mercado los había de muchos colores. Observé, además, que los metían en canastos de mimbre y los llevaban a una nave, lo que aumentó mi curiosidad por saber qué había dentro.
Cuando me disponía a entrar, vi en la puerta un enorme contenedor lleno de botes de temperas vacíos y muchos pinceles de múltiples colores, aunque con pocos pelos.
Una vez dentro, mi sorpresa fue inmensa: había tanta gente como en el campo; pero estaban ocupados en pintar los pétalos de los tulipanes.
Entonces me expliqué por qué eran de tantos y tan variados colores: resulta que los decoraban a su antojo.
A partir de ese día comencé a cultivar margaritas y les pintaba los pétalos de colores.
La verdad, ¡quedaban muy kukis!
¿Sabes? Creo que esta fiesta es mi favorita por la alegría y el espectáculo que hay en las calles.
Vale, vale... Aquí viene la historia buena, que fue lo que nos pasó a mi amigo Víctor y a mí:
Vimos un hombre que iba de preso y nos pareció muy realista. ¡Pero le seguía la poli¡ Comenzamos a pensar, y, Víctor y yo nos dimos cuenta de que era un preso de verdad, que se había escapado de la cárcel que estaba a la vuelta de la esquina.
Juan no se acordaba de que era un pez.
Toda la noche, el que fuera estuvo dando gritos. A la mañana siguiente, los vecinos se reunieron e hicieron un plan: permanecer despiertos en sus habitaciones, y cuando sonara ese grito por vez primera, salir todos a una.
Así fue. Salieron a la calle y descubrieron que... ¡Era un loro, que estaba diciendo "Hola"! Y como no le hacían ni caso decidió gritar más fuerte y más grave.
Amelia había venido a España para montar una empresa, porque era una ingeniera extraordinaria en la especialidad de aeronáutica.
El problema fue que, al ser de raza negra, nadie quería trabajar con ella. Así que, la pobre, tuvo que volver a su país sin una peseta (que en esos tiempos eran pesetas) y sin trabajo... Como podéis suponer, la echaron.
Mi profesor dice que no me deje llevar por las apariencias; que, muchas veces, hacen que nos equivoquemos.
TODO OCURRIÓ EL LUNES PASADO, UN TERRIBLE DÍA QUE SOFÍA NO CONSIGUE OLVIDAR.
FEDERICO, UN NIÑO DEL COLE AL QUE VA SOFÍA, ESTABA MONTANDO SU BICICLETA TRANQUILAMENTE, CUANDO SE LA ENCONTRÓ APOYADA AL LADO DEL SEMÁFORO:
- ¡HOLA!
- ¡AH, HOLA, SOFÍ! VOY CONTIGO AHORA MISMO.
Y AHÍ PASO TODO. FEDERICO SE APRESURÓ CRUZANDO EL SEMÁFORO ROJO Y, UN COCHE LO ATROPELLÓ.
AHORA FEDERICO ESTÁ HOSPITALIZADO GRAVEMENTE, Y SOFÍA NO PUEDE VIVIR DEL DOLOR.
29 enero, 2011
A vivir con tranquilidad,
Y eso nos supone felicidad.
Nunca olvides a la Paz
Porque ella es una realidad
Y puede ser un amigo
Que te guíe en tu buen camino.
La Paz ocurre lentamente.
Así que di conmigo:
¡VIVA LA PAZ PARA SIEMPRE!
sencilla de verdad.
La paz, una palabra
que has de utilizar.
La paz es vida,
la paz es amor,
la paz está
hasta en el mas mínimo rincón.
Hay muchos niños perdidos,
que no saben decir que sí;
la paz es su camino,
su meta, su vivir.
Si miras con atención,
una paloma verás volar.
No temas, no te eches a llorar:
es la paloma de la paz.
Y ahora, con mucha alegría,
escribe tú una poesía...
Yo ya he escrito la mía.
vuela sin parar
y reparte a todo el mundo
gotitas de amistad.
Un gorrión
piensa sin cesar:
Qué bonito sería el mundo
si reinara la paz.
Un mirlo cantarín dice así:
Si paloma y gorrión
tuvieran razón,
todas las mañanitas
cantaría yo.
por las palomitas,
blanquitas,bonitas,
blancas palomitas.
No queremos guerra,
sino paz en la Tierra.
El color blanco significa
paz; en cambio el rojo
significa amar.
Volar,volar,dulces
palomas de la paz.
A algunos les gusta
la paz; a otros, en cambio,
les gusta matar.
Tú nunca dejes de amar,
porque la alegría significa
paz.
Aunque no te guste la paz,
siempre estarás en mi mente.
Nunca serás mi pasado, pero sí
mi presente.
tendremos felicidad.
Si no tenemos paz,
tendremos maldad.
Con la paz,
ganamos todo.
Sin la paz:
guerra, hambre y todo el mal.
LA VIDA ES PAZ;
SI POR LA NOCHE
VES A LA PALOMA,
REZA POR LIBERTAD.
QUEREMOS BAILAR,
QUEREMOS CANTAR
Y CELEBRAR LA PAZ.
ME GUSTARÍA
QUE ALGÚN DÍA
REINE LA PAZ.
SI NO REINA,
ME VOY A ENFADAR.
25 enero, 2011
21 enero, 2011
En la ribera del Oka vivían felices numerosos campesinos; la tierra no era fértil pero, labrada con constancia, producía lo necesario para vivir con holgura y aún daba para guardar algo de reserva.
Iván, uno de los labradores, estuvo una vez en la feria de Tula y compró una hermosísima pareja de perros sabuesos para que cuidaran su casa. Los animalitos al poco tiempo se hicieron conocidos por todos los campos de la vega del Oka por sus continuas correrías, en las que ocasionaban destrozos en los sembrados; las ovejas y los terneros no solían quedar bien parados.
Nicolai, vecino de Iván, en la primera feria de Tula compró otra pareja de perros para que defendieran su casa, sus campos y sus tierras.
Pero, al tiempo que cada campesino –para estar mejor defendido- aumentaba el número de perros, éstos se hacían más exigentes. Ya no se contentaban con los huesos y demás sobras de la casa, sino que había que reservarles los mejores trozos de las matanzas y hubo que construirles recintos cubiertos y dedicar más tiempo a su cuidado.
Al principio, los nuevos guardianes riñeron con los antiguos, pero pronto se hicieron amigos y los cuatro hicieron juntos las correrías.
Los otros vecinos, cuando vieron aumentar el peligro, se hicieron también con sabuesos, y así, al cabo de pocos Años, cada labrador era dueño de una jauría de 10 ó 15 perros. Apenas oscurecía, al más leve ruido, los sabuesos corrían furiosos y armaban tal escándalo que parecía que un ejército de bandidos fuera a asaltar la casa. Los amos, asustados, cerraban bien sus puertas y decían:
- ¡Dios mío! ¿Qué sería de nosotros sin estos valientes sabuesos que abnegadamente defienden nuestras casas?
Entretanto, la miseria se había asentado en la aldea; los niños, cubiertos de harapos, palidecían de frío y de hambre, y los hombres, por más que trabajaban de la mañana a la noche, no conseguían arrancar del suelo el sustento necesario para su familia. Un día, se quejaban de su suerte delante del hombre más viejo y sabio del lugar, y como culpaban de ella al cielo, el anciano les dijo:
- Son los defensores de nuestros hogares- exclamaron los labradores.
- ¿Los defensores? ¿De quién os defienden?
- Señor, si no fuera por ellos, los perros extraños acabarían con nuestros ganados y hasta con nosotros mismos.
- ¡Ciegos, ciegos! –contestó el anciano- ¿No comprendéis que los perros os defienden a cada uno de vosotros de los perros de los demás, y que si nadie tuviera perros no necesitaríais defensores que se comen todo el pan que debiera alimentar a vuestros hijos? Suprimid los sabuesos, y la paz y la abundancia volverán a vuestros hogares.
Y siguiendo el consejo del anciano, se deshicieron de sus defensores y un Año más tarde sus graneros y despensas no bastaban para contener las provisiones, y en el rostro de sus hijos sonreía la salud y la prosperidad.
León Tolstoi
En un pequeño pueblo, una mujer se llevó una gran sorpresa al ver que había llamado a su puerta un extraño, correctamente vestido, que le pedía algo de comer.
· “Lo siento”, dijo ella, “pero ahora mismo no tengo nada en casa”.
· “No se preocupe”, dijo amablemente el extraño. ”Tengo una piedra de sopa en mi cartera; si usted me permitiera echarla en un puchero de agua hirviendo, yo haría la más exquisita sopa del mundo. Un puchero muy grande, por favor.
A la mujer le picó la curiosidad, puso el puchero al fuego y fue a contar el secreto de la piedra de sopa a sus vecinas. Cuando el agua rompió a hervir, todo el vecindario se había reunido allí para ver a aquel extraño y su piedra de sopa.
El extraño dejó caer la piedra en el agua, luego probó una cucharada con verdadero deleite y exclamó:
· “¡Deliciosa! Lo único que necesita es unas cuantas patatas.”
· “¡Yo tengo patatas en mi cocina!”, gritó una mujer. Y en pocos minutos estaba de regreso con una gran fuente de patatas peladas que fueron derechas al puchero.
El extraño volvió a probar el brebaje.
· ”¡Excelente!, dijo; y añadió pensativamente:
· “¡Si tuviéramos un poco de carne, haríamos un cocido de lo más apetitoso....!”
Otra ama de casa salió zumbando y regresó con un pedazo de carne, que el extraño, tras aceptarlo cortésmente, introdujo en el puchero.
Cuando volvió a probar el caldo, puso los ojos en blanco y dijo:
· ” ¡Ah, que sabroso! Si tuviéramos unas cuantas verduras, sería perfecto, absolutamente perfecto...”
Una de las vecinas fue corriendo hasta su casa y volvió con una cesta llena de cebollas y zanahorias. Después de introducir las verduras en el puchero, el extraño probó nuevamente el guiso y, con tono autoritario, dijo:
· “La sal”.
· ”Aquí la tiene”, acudió la dueña de la casa.
A continuación dio orden:
· “Platos para todo el mundo”.
La gente se apresuró a ir a sus casas en busca de platos. Algunos regresaron trayendo incluso pan y frutas. Luego se sentaron a disfrutar de la espléndida comida, mientras el extraño repartía abundantes raciones de su increíble sopa.
Todos se sentían extrañamente felices: reían, charlaban y compartían por primera vez su comida. En medio del alborozo, el extraño se escabulló silenciosamente, dejando tras sí la milagrosa piedra de sopa, que ellos podrían usar siempre que quisieran hacer la más deliciosa sopa del mundo.
(Cuento tradicional checo)
Había una vez un rey que ofreció un gran premio a aquel artista que pudiera captar en una pintura la paz perfecta. Muchos artistas lo intentaron. El rey observó y admiró todas las pinturas, pero solamente hubo dos que a él realmente le gustaron y tuvo que escoger entre ellas.
La primera era un lago muy tranquilo. Este lago era un espejo perfecto donde se reflejaban unas placidas montañas que lo rodeaban. Sobre estas se encontraba un cielo muy azul con tenues nubes blancas. Todos quienes miraron esta pintura pensaron que reflejaba la paz perfecta.
La segunda pintura también tenía montañas. Pero estas eran escabrosas y descubiertas. Sobre ellas había un cielo furioso del cual caía un impetuoso aguacero con rayos y truenos. Montaña abajo parecía retumbar un espumoso torrente de agua, que no revelaba nada pacífico.
Pero cuando el Rey observó cuidadosamente, vio tras la cascada un delicado arbusto creciendo en una grieta de la roca. En este arbusto se encontraba un nido. Allí, en medio del rugir del la violenta caída de agua, estaba sentado plácidamente un pajarito...
¿Paz perfecta...?
¿Cuál crees que fue la pintura ganadora?
El Rey escogió la segunda.
¿Sabes por qué?
"Porque -explicaba el Rey- Paz no significa estar en un lugar sin ruidos, sin problemas, sin trabajo duro o sin dolor. Paz significa que a pesar de estar en medio de todas estas cosas permanezcamos calmados dentro de nuestro corazón. Este es el verdadero significado de la paz."
(La Paz perfecta, anónimo)
08 diciembre, 2010
VISITA AL CENTRO COMERCIAL
02 diciembre, 2010
Si tienes en cuenta esas premisas mínimas, ya puedes comenzar a escribir un relato. Aquí dispones de quince ideas que pueden motivarte. Al tiempo, te servirán de ayuda a la hora de seguir un sistema y trazar una disciplina de trabajo:
1) Dos bolsas: una con nombres propios; la otra, con apellidos. Cada alumno coge un papel de cada. A partir de ahí ha de hacer un relato que gire en torno a dicho personaje.
2) Continuar desarrollando un relato a partir de una frase o un párrafo, dados al comienzo. Ejemplo: “La gente corría por las calles de manera alocada. Por la ventana entraba un zumbido caótico en aumento. Me puse algo por encima y bajé al portal…”
3) Condicionar un relato a la ausencia de una determinada clase de palabras; por ejemplo, preposiciones. O prohibiendo la utilización de una vocal concreta; por ejemplo, sin la letra e.
4) Escribir un relato en un contexto circunstancial dado; por ejemplo, en el desfile de las carrozas de las fiestas de Getafe. Y en una localización dada; por ejemplo, en la calle Madrid.
5) Darles dos sustantivos cogidos al azar de dos bolsas distintas. Ambos grupos no deben tener afinidad alguna. El alumno tiene que montar un relato que ponga en relación las dos palabras. Por ejemplo, gafas-manzanilla.
6) Relatar de manera inversa, comenzando el texto por acontecimientos que son posteriores en el tiempo lógico. Por ejemplo, haciendo aparecer un cadáver al principio y dejando el crimen para el final del relato.
7) Dar al alumno la idea de una máquina imposible (por ejemplo, la máquina de vestirse) e incitarle a conformar un relato con ella como núcleo vertebrador.
8) Partiendo del resumen de un cuento famoso (por ejemplo, Aladino), poner la condición de adecuarlo a la época actual y a una localidad concreta.
9) Se proporciona al alumno una palabra extraña. Por ejemplo, BALQUIJE. A partir de ella y de manera libre tiene que montar un relato que gire en torno a dicha palabra.
10) También se le puede presentar una fecha sin más; por ejemplo, un lunes, 27 de febrero de 2008; y animar al alumno a encuadrar el relato como si en esa fecha se produjese algo muy importante.
11) Poner la condición de escribir en un entorno histórico conocido y adecuado para los alumnos; por ejemplo, un relato en la época de los romanos.
12) Escribir un relato con la condición de utilizar un número dado de palabras con prefijo. No vale repetir ninguno de ellos.
13) Coger objetos inanimados y conformar un relato ilógico como si fuesen sujetos de carne y hueso. Por ejemplo: "La escoba no sabía que tomar a esas horas de la mañana. Por fin, acuciada por la mirada de aquel desodorante que atendía detrás del mostrador, se decidió por un café con leche..."
14) En base al temario de Lengua del curso en cuestión, se puede animar a los alumnos a escribir numerosos y diversos relatos. Por ejemplo, partiendo de una palabra polisémica (banco), el alumno ha de hacer un relato en el que intervengan todas y cada una de las acepciones.
15) Hacer un relato con motivo de un día conmemorativo; por ejemplo, por el Día de
21 noviembre, 2010
07 junio, 2010
MÁS POEMAS DE 3º
Verdoso y azulado
el mar está agitado
Barquitos veleros
rayos de luna
están agitados
como el bebé en la cuna.
El mar ha parado
la marea ha bajado
los peces nadando
en el agua cantando.
Darío Aguado
¡QUÉ DIVERTIDO!
El mar es bonito
me puedo bañar
pelotas castillos
¡Qué divertido!
El mar es caprichoso.
Cuando está tranquilo
entro sin sigilo
cuando está enfadado
entro con cuidado.
EL mar es bonito
me puedo bañar
pelotas castillos
¡ Qué divertido!
Raquel del Brio
ME GUSTA EL MAR
Me gusta el mar.
Porque está muy calentito
porque está muy calentito.
Me pongo a bucear
y veo caballitos de mar.
Veo tiburones
y también caracoles.
Cuando voy a la playa
buceando ..buceando
no paro de bracear.----
Celia Muñoz
02 mayo, 2010
Elena Heras, 4º de Primaria.
Hay corazones tristes,
hay corazones contentos…
Y a los más flacos
¡se los lleva el viento!
Hay corazones iluminados,
hay corazones oscuros,
hay corazones infantiles
y hay corazones maduros.
Hay corazones bonitos,
hay corazones feos;
pero aún así, todos juntos
juegan en el recreo.
Hay corazones enfermos,
hay corazones sanos,
hay corazones educados
y corazones marranos.
Hay corazones listos
y otros, no tanto.
Hay corazones cansados
28 abril, 2010
22 abril, 2010
15 marzo, 2010
DELANTE Y DETRÁS
05 marzo, 2010
LAS TIJERAS DE MI ABUELA
Las tijeras de mi abuela
se abren y se cierran .
¡Me gusta jugar con ellas!
Cuando voy los domingos
a comer paella
¡Me gusta jugar con ellas!
Mi abuela me ayuda
a dibujar figuras
después las pintamos
y al final las recortamos.
Julia Villalba
POEMAS AL SOL
El Sol es bonito
quiere ser mi amigo.
Nos da luz y calor
tiene su propio color.
Es el mejor amigo
que he conocido.
Se esconde con las nubes
que también son bonitas
Al atardecer no es amarillo
sino rojizo.
Bueno me despido
adiós buen amigo.
Alejandro Valderrábano
El Sol cada mañana
al día da alegría.
Qué alegría tiene el día
cuando el sol brilla.
El SOL brilla.. y brilla
¡ Qué maravilla!
Jaime Román
POEMAS AL MAR
Porque está muy limpito.
El mar es muy bonito
Aunque está el calamarcito.
Cuando me baño
en verano
Los peces me siguen.
nadando..
Elena Raya
¡QUÉ BONITO ES EL MAR!
De ola en ola
el mar tiene una caracola.
De pez en pez
el viento silba otra vez
El mar está bonito
cuando se esconde el solecito.
Alejandro Valderrábano
LAS OLAS DEL MAR
Naranja y rosa
las olas del mar
Naranjas y y rosas
¡ qué bonitas están!
Naranja y rosa
me puedo bañar
naranja y rosa
al atardecer jugar.
Paula Contreras
EL MAR
Azul cristalino
como el mar.
Azul cristalino
las olas del mar
Agua salada
agua de mar.
Azul cristalino
como el mar
Azul cristalino
las olas del mar
Jaime Román
¡EL MAR!
Rosa y morado
yo veo el mar
todos los días
al despertar.
Arena de playa
agua salada
peces contentos
nadando en el agua.
Lucía Pardo
EL MAR
El mar es precioso
muy bonito y oloroso .
Si te fijas ¡vaya vaya!
Una flor de papaya.
Al que le gusta
como a mí soñar
Cielo y tierra
están en el mar.
Bueno me despido
Adiós buen amigo…
María de Diego
ME GUSTA EL MAR
Me gusta el mar
porque es bonito.
Me gusta el mar
por su solecito
y su color de cristal
Pablo Torres
LA LUNA COMO EL MAR
Miré a la Luna
del color del mar
Dorada y de plata
el color del ganar.
Si quieres la gloria
debes mirar el mar.
Ignacio González
LA ESTELLA DEL MAR
El mar
está en la playa
Salada es el agua
donde me baño
cada mañana.
Todos los días
pongo la silla
y me entretengo
haciendo cosillas.
Ví una estrella de mar
la quise pescar
y empecé a nadar.
Julia Villalba
EL CABALLITO DEL MAR
El caballito del mar
da volteretas sin parar.
Hace mucha gracia
¡Qué guasa!
Tengo un caballito de mar
al que le gusta cabalgar
¡Qué bonita es la playa
junto al mar!
Estrella Castro
DE OLA EN OLA
Me gusta zapatear
de ola en ola
me gusta jugar.
De ola en ola
soy campeón
de nadar en el mar.
Iván Grygorchuk
TURY TURY
Los delfines
saltan en el mar
Tury tury
El calamar
se va a despertar.
La concha abierta
del mejillón.
Tury tury
Junto al caballito
volteretas da.
Que precioso
es el mar.
Tury tury
Para jugar
y nadar.
Iván Grygochuk
EL MAR
Me gusta el mar.
Con él jugar
y en la arena saltar.
Cuando voy a la playa
con mi hermana jugar
castillos de arena
poder fabricar.
¡ Me gusta el mar!
Lucía Rodríguez
El MAR
Me gusta el mar
allí puedo ir a jugar.
Pelotas castillos….
¡Qué divertido!
Olitas atrevidas
que juegan unidas
y hacen amigas
muy divertidas.
Llegó la tarde
hay que descansar
para mañana
poder ir a jugar.
Patricia Jimeno
PRECIOSO MAR
El mar es precioso
azul y verdoso.
Sobre las olas del mar
me gusta surfear.
Los niños en la orilla
se lo pasan de maravilla.
Para los peces la espuma
les sirve de cuna..
El mar es precioso
Azul y verdoso
sobre las olas del mar
me gusta surfear.
Yaiza Muñoz
12 noviembre, 2009
EL HADA DEL OTOÑO
que nunca se viste de rosa.
Es un hada divertida
que nunca se queda dormida.
Es un hada muy pintora
que pinta de amarillo las hojas.
También las pinta naranja
cuando del árbol se bajan.
Y cuando pinta las nubes
por una escalerita sube