20 diciembre, 2007

Marta Reinoso Albarrán,
6º de Primaria.

Cuando iba a casa de Sara me encontré al farolero haciendo su trabajo como siempre.
- Buenas noches -dije yo.
- Buenas noches -me respondió.
Al volver estaba con la misma farola, parecía estar peleando con ella.
- ¿Le ayudo? -pregunté.

- Si puede... -contesto él.
Entonces le ayudé y me lo agradeció. Luego, siguió haciendo su trabajo y yo me fui a casa de mis tíos. Allí me estaba esperando toda mi familia para poder cenar y marcharnos a casa a dormir y a ver la tele como todos los domingos.
Después de cenar tranquilamente, cuando íbamos de camino a casa, nos cruzamos de nuevo con el farolero, que seguía alumbrando toda la calle mayor.
Y me guiñó el ojo.

1 comentario:

paula dijo...

hoolaa¡¡¡¡¡¡¡!!!!!!!
que tal yo muy bien y te dejo un comentario porque me gusta y porque un viernes por la tarde que me aburria pos me puse a escrivir comentarios